jueves, 24 de abril de 2014

Parto (parte 2)

Tenía a mi personita enganchada al pecho. No me sentía en el partitorio, sólo, ella y yo, en simbiosis perfecta, acople total, paradas en el tiempo.
Aún tenía la oxitocina chutándome, esperando la tercera parte del parto, la expulsión de la placenta.
No era consciente del tiempo, hasta que la ginecóloga, de manera muy seria, me informó que hacía media hora del parto y aún no había sido expulsada.

"Tendremos que sacarla de manera manual".
A partir de aquí, oscuridad.
Al transcurso de los meses he ido desgranando un rato del cual no guardo ningún recuerdo.
Soy consciente de estar llorando de dolor aún y la anestesia. Del frio sentido. De la desesperación al despertar y no ver a mi personita. Ni a mi marido. Expulsados los dos del paritorio cuando creían que me iba. Legrado de urgencia, hemorragia severa... Y soledad.
Los días siguientes fueron mejorando lentamente... No me tenía en pie, me mareaba de la anemia que me quedó, las visitas en el hospital y yo extremadamente cansada...dolor. No tenía fuerzas de sostener a mi personita, tan indefensa...
Una vez de alta, pasé casi 80 días con pérdidas hasta que se descubrió que tenía retención placentaria. Nuevo legrado de urgencia. Por suerte, a partir de aquí, aunque no quedé limpia del parto todavía, todo mejoró.

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Quien soy yo

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Un bonito lugar, Spain
De treinta y (muchos) años. Sirve decir que mi espíritu se mantiene joven y que los 40 son los nuevos 20?? Semi neurótica y controladora, una joya. Hace años, la frase que me caracterizaba, para acallar comentarios de la gente que me rodea ha sido "los niños, de lejos y en jaulas". Ahora es "tu me ves con ganas de no dormir en años?" Así evito explicaciones complicadas o directamente mentir descaradamente. No tengo ganas de explicar mis neuras.